Las mascotas son una parte fundamental en nuestras vidas, por lo que siempre intentamos cuidarlas de la mejor manera posible. Sin embargo, muchas veces no somos capaces de detectar si están sufriendo algún problema. ¡Ojalá pudieran hablar! Lo que sí que podemos hacer es estar atentos a los principales síntomas que surgen con la aparición de determinadas enfermedades o dolencias. Una de estas enfermedades puede ser, por ejemplo, la artrosis. En este caso, los síntomas serían una mayor rigidez al caminar, o una posición más encorvada de lo normal. Además, el requerimiento de mayor esfuerzo a la hora de levantarse o realizar actividades como subir o bajar escaleras. Como ya puedes suponer, en este artículo hablaremos de la rehabilitación de la artrosis en perros.
¿Qué es la artrosis y cómo afecta al perro?
Pues bien, como adelantábamos, la artrosis es una enfermedad de tipo degenerativo que poco a poco destruye el cartílago. Esta enfermedad de progresión lenta y sin tratamiento curativo definitivo llega a afectar a las articulaciones. En muchos casos, esto acaba derivando en contracturas o problemas similares, debido al cambio postural del animal.
Normalmente, la artrosis es detectada en perros de edad avanzada. Sin embargo, esta enfermedad puede ser diagnosticada en perros de todas las edades. El motivo, se debe sobretodo, a razones genéticas, sucesión de traumatismos o problemas de salud como la obesidad.
Ya se han comentado algunos de los síntomas de la artrosis canina, a los que se pueden añadir otros:
- Signos claros de dolor.
- Apatía o insociabilidad.
- Pérdida del apetito.
- Cambio en rutinas diarias, como el lugar para dormir.
- Etc.
Al tratarse de una enfermedad degenerativa, la mejor manera de paliar estos síntomas es la rehabilitación veterinaria. Además, esto ayudará al perro a vivir la enfermedad de una forma mucho más llevadera.
Cómo se realiza la rehabilitación de la artrosis en perros
El objetivo principal de la rehabilitación de la artrosis en perros es que éste recupere la energía perdida. Esto se consigue gracias a la rehabilitación física y a la realización de ejercicio terapéutico. Así se evitará el sedentarismo y se fomentará la recuperación del músculo del animal. Debemos tener en cuenta que este tipo de terapias serán siempre personalizadas y adaptadas al punto de partida individual de cada animal.
La principal maquinaria utilizada en la rehabilitación de la artrosis en perros son las EMS, TENS, las de magnetoterapia y ultrasonidos. Además, estas se combinan con otro tipo de terapias tales como la termoterapia o las terapias manuales.
¿Qué resultados puedo esperar?
El propósito de las terapias para la artrosis canina es la reactivación de los músculos. Por ello, algunos de los resultados que podemos esperar son los siguientes:
- Reducción considerable de la inflamación y el dolor.
- Mejora del movimiento de la articulación.
- Fortalecimiento de los músculos para una mejor reparación de cualquier tejido dañado.
- Reducción de la velocidad de avance de la artrosis canina.
- Mejor calidad de vida para el perro a largo plazo.
Además de todos lo cuidados a nivel muscular y articular, también será importante cuidar la alimentación de nuestra mascota. Los especialistas nos guiarán a través de determinadas revisiones de la dieta del perro. De esta manera, es importante tener en cuenta que la alimentación influye también en la recuperación ante la enfermedad.
Además de la rehabilitación, ¿qué más se puede hacer por el perro?
La rehabilitación de la artrosis en perros es la solución más efectiva para intentar frenar el avance de esta enfermedad. Sin embargo, existen otras cosas que podemos hacer para que la artrosis canina de la mascota sea mucho más llevadera.
Por un lado, la cama en la que duerme es muy importante. Será primordial que el perro duerma en una cama blanda para evitar la aparición de úlceras. De igual modo, debido a la enfermedad, estos perros tienden a resbalarse. Por ello, es muy recomendable el uso de alfombras para evitar suelos deslizantes que hagan que el perro se resbale. Esta es una de las principales causas de lesiones. Por último, la temperatura en casa debe ser equilibrada, ni mucho frío ni mucho calor. Las temperaturas extremas pueden dañar las articulaciones a una velocidad mayor.
Y fuera de casa, no hay que olvidar la correcta realización de ejercicio físico diario para una mejor recuperación. Esto no significa que haya que forzar al perro ni mucho menos. Siempre debe hacerse en la medida de cada uno, ya que la artrosis en perros suele ser muy dolorosa.
El ser humano es el mejor amigo del perro
Efectivamente. Sin duda alguna, el ser humano es el mejor amigo que un perro puede tener y él lo sabe. Por eso, depende mucho del dueño la recuperación que el perro tenga de esta enfermedad. La artrosis canina es una patología muy pesada, pero si lo hace en compañía los resultados son mucho mejores. La voluntad y la implicación del dueño son primordiales en la recuperación del perro.
Si te interesa la rehabilitación del perro de un modo profesional, no dudes en consultar por el Curso de Rehabilitación y Fisioterapia Veterinaria en pequeños animales que impartimos en Escola d’Oficis Catalunya. En este curso aprenderás sobre la rehabilitación de la artrosis en perros y muchos otros temas relacionados.