El estrés en gatos es el causante de muchas de las visitas en la consulta veterinaria. Su presentación incluye distintas formas clínicas, diferentes síntomas y manifestaciones más agudas o crónicas.
El estrés felino es junto a la insuficiencia renal, la enfermedad más prevalente en gato indoor, en el S XXI.
Ahora bien, ¿por qué se produce el estrés en gatos? En este artículo vamos a explicarte cuáles son sus causas principales y describiremos algunos de los signos y síntomas más comunes. Además, te ofreceremos algunos consejos que te ayudarán a detectarlo y estrategias para prevenir el estés en gatos.
¿Por qué se estresan los gatos?
Hay muchas posibles causas del estrés felino.
Causas externas
Las causas externas del estrés en gatos son aquellas que dependen de su entorno social, del territorio, de su rutina diaria y de los estímulos sensoriales. Los gatos son seres muy territoriales y muy sensibles a los cambios ambientales o sociales que se producen en su territorio.
- Cambios de mobiliario.
- Ruidos fuertes (aspirador, lavadora, etc.).
- Visitas de personas desconocidas.
- Cambios de rutina diaria.
- La llegada de un bebé o un nuevo miembro de la familia.
- Olores nuevos o desconocidos (ambientadores, velas aromáticas, etc.).
A la vez también requieren de las mismas condiciones ambientales que disponían sus ancestros y sus compañeros actuales, los gatos outdoor, que viven en el exterior.
- Zona de alimentación.
- Zona de aseo.
- Zona de juego.
- Zona de descanso.
- Zona de refugio.
Existe la falsa creencia de que los gatos son animales muy independientes que no necesitan compañía. Pero pasar mucho tiempo solos es muy perjudicial para ellos. Requieren de compañía y de contacto social a través de caricias, juegos y experiencias sensoriales variables.
Causas internas
La causa interna número uno del estrés en gatos es el dolor y viene siempre precedida de una patología no diagnosticada o no tratada de forma correcta.
Signos y síntomas del estrés en gatos
Los felinos son animales capaces de ocultar a la perfección sus problemas o afecciones. Y lo mismo sucede con el estrés. Sin embargo, si se les presta la atención suficiente, es posible distinguir la mayoría de síntomas producidos por el estrés desde un momento temprano.
El síntoma clave del estrés felino es el cambio de su comportamiento y rutina habitual.
- Alteraciones alimentarias: Dejar de comer, comer menos o rechazar su comida favorita.
- Alteraciones digestivas: Vómitos intermitentes y heces de consistencia variada.
- Acicalamiento excesivo y compulsivo (alopecia psicógena) o la nula higiene (pelo en mal estado, formación de nudos incluso rastas).
- Alteraciones de eliminación: Orinar o defecar fuera del arenero, orinar pocas cantidades muchas veces al día, orinar con sangre, etc.
- Alteraciones conductuales: Esconderse, rechazar el juego, las caricias o estar en sus lugares favoritos, etc.
¿Cómo detectar el estrés en gatos?
Intenta observar a diario:
- Su comedero, bebedero y arenero.
- Su expresión facial y lenguaje corporal.
- Su rutina diaria y conducta social.
En caso de detectar alguna alteración contacta de inmediato con el veterinario ya que el estrés crónico genera unas dosis elevadas y mantenidas en sangre del cortisol. La hormona de la inflamación crónica y la inmunosupresión (depresión del sistema inmune, supresión de sus defensas).
Estrategias para reducir el estrés
Vamos a comentar tres estrategias fundamentales para reducir el estrés en gatos.
Enriquecimiento ambiental
Lo fundamental es crear un ambiente donde el gato le permita disfrutar de su día a día tal y como lo haría cualquier gato en libertad.
Para ello es importante disponer de:
- Zonas por las que pueda escalar, ya sea con árboles para gatos o con estanterías a las que pueda subirse.
- Zonas en las que pueda refugiarse en altura y al nivel del suelo.
- Un cuenco con agua fresca o una fuente y la comida siempre a su disposición.
- El arenero debe estar siempre limpio, ya que los gatos odian los malos olores y la suciedad.
- Rascadores verticales y horizontales para realizar el marcaje visual y territorial natural en ellos.
Enriquecimiento sensorial
Ofrecerle juguetes interactivos que le permitan utilizar su sentidos.
- Cambiar los juguetes cada 2 o 3 días.
- Ofrecer juguetes tipo caza.
- Dedicar tiempo a las caricias, masajes, cepillado,etc. Unos 10 o 15 minutos diarios, en función del grado de tolerancia del gato.
- Ventanas exteriores a través de las cuales puedan percibir estimulación visual o imágenes en la pantalla.
- Estimulación gustativa con cambios de texturas alimentarias y sabores.
- Respetar su intimidad, sus períodos de descanso y su tolerancia.
Uso de feromonas
Las feromonas son sustancias naturales producidas y liberadas de forma natural por el gato para marcar el territorio, informar de su estado sexual o en el caso de las hembras lactantes, para apaciguar a las crías.
Las feromonas pueden aplicarse en el territorio del gato en forma de difusor o en spray. Relajaran al gato haciendo que se sienta en un lugar seguro y que reconozca el entorno como propio.
Recuerda que el bienestar emocional es el mejor aliado contra el estrés en los gatos. Ofreciendo a sus dueños las recomendaciones y consejos que te hemos dado en esta guía les estarás ayudando a que sus mascotas se encuentren mejor y no enfermen.
